El Estado ruso “financió completamente” a Wagner “mediante el presupuesto del ministerio de Defensa”, afirmó el presidente Vladimir Putin este martes 27 de junio en un discurso ante el cuerpo militar, difundido por televisión. «Entre mayo de 2022 y mayo de 2023, el Estado giró 86.262 millones de rublos (alrededor de 1.000 millones de dólares) en pagos al grupo», precisó. Agregó además que el jefe de Wagner, Yevgueni Prigozhin, ganó unos 80.000 millones de rublos (937 millones de dólares) mediante su empresa Concord, que proporcionaba alimento al ejército.
La trama y las consecuencias del amotinamiento de Wagner el pasado sábado no están prontas de acabar. Los rusos se esperan a una cacería de brujas. Algo que los medios de comunicación han llamado modestamente “cambios de personal”.
Al mismo tiempo, Vladimir Putin ha hecho honores a figuras leales, como la Rosgvardia, la Guardia Nacional creada en 2016 y dirigida por uno de sus antiguos guardaespaldas. Ésta además recibirá nuevos tanques y otros equipos pesados.
El presidente ruso armó toda una secuencia mediática para demostrar que el país sigue bajo control. Empezó la noche del lunes con un breve discurso solemne. Los mensajes más importantes los dio el martes, con vehículos de policía y un desfile de uniformados por la alfombra roja de uno de los patios del Kremlin.
Reunió a todos los cuerpos de seguridad, desde el FSB hasta el ejército, para felicitarlos por su comportamiento durante el motín de Wagner.
“No hubo necesidad de retirar unidades de combate” de Ucrania
«En los enfrentamientos murieron compañeros de armas: los pilotos. No se acobardaron y cumplieron honorablemente con su deber militar», declaró el jefe de Estado.
Enfatizó que “no hubo necesidad de retirar unidades de combate» de Ucrania, insinuando de este modo que el ejército ruso, incluso en plena contraofensiva ucraniana, puede prescindir perfectamente del apoyo Wagner en el terreno.
Mientras Vladimir Putin felicitaba a los rusos por su actitud calmada y unida durante la rebelión, el miércoles por la mañana, el diario Kommersant dio a conocer un estudio interesante. El sábado del amotinamiento, en la región de Voronezh, la venta de latas de carne, pescado y verduras en conserva aumentó en un 830%, en Rostov la venta de harina en un 500% y en la región de Moscú la venta de cereales subió en un 150%. Una evidencia que los rusos que se encontraban en la trayectoria de Wagner sí se esperaban a un largo periodo de inestabilidad.
Fuente: Radio Francia Internacional/ Anissa Jabri, corresponsal en Moscú.