Las zonas montañosas de la Comarca Ngabe Buglé se han convertido en cómplices de los abusos y maltratos que a diario son sometidos los niños, niñas y adolescentes por parte de los agresores sexuales, en su mayoría conocidos por las víctimas.
Recientemente, una menor de cinco años de edad fue asesinada y violada por un hombre de 26 años, quien fue detenido por ser el principal sospechoso del crimen, aprovechó, según versiones no oficiales, que libaba licor con el padre de la menor y fue el momento que vio la vulnerabilidad de la pequeña para cometer en terrible asesinato.
Lucy Córdoba, defensora de los derechos del niño, una vez más lamentó que estos casos se sigan registrando en nuestro país y pidió castigos más fuertes para los depredadores sexuales, ya que «las actuales leyes son muy flexibles y apoyan a estos abusadores».
Córdoba, reveló a este medio que en la Comarca aún permanecen las llamadas «sectas religiosas» las cuales provocan daño a los menores, «las menores están quedando embarazadas y son entregadas a los líderes de esas sectas».
Según estadísticas del Ministerio Público de enero a mayo se reportaron 1,390 denuncias de maltrato contra menores de edad.