Panamá y Estados Unidos firmaron un memorando de entendimiento sobre asistencia y cooperación en asuntos migratorios, con el objetivo de cerrar el paso de inmigrantes ilegales a través del Darién, una región que ha enfrentado una grave crisis humanitaria.
El acuerdo fue firmado por el Canciller panameño, Javier Martínez-Acha, y el Secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas. Según el memorando, el gobierno estadounidense se compromete a cubrir los gastos de repatriación de los inmigrantes que entren ilegalmente por el Darién.
«Apoyar a Panamá con equipos, transporte y logística para los extranjeros detectados dentro de los flujos migratorios en contravención de las leyes migratorias de Panamá (en adelante, ‘flujos migratorios irregulares’), quienes estarán sujetos a medidas administrativas migratorias de conformidad con el derecho panameño», dice textualmente el memorando de entendimiento firmado por Estados Unidos.
Por su parte, Panamá se comprometió a cumplir con todos los acuerdos y convenios internacionales sobre los derechos de los inmigrantes y aquellos en condición de refugiados.
El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, se mostró comprometido con resolver la crisis del Darién y acabar con el negocio ilegal de trata de personas.