Nueva York ha sufrido en la noche de este miércoles inundaciones catastróficas tras sufrir las lluvias torrenciales más fuertes desde que se tienen registros. Muchas partes de la ciudad quedaron bajo el agua por los efectos de la tormenta tropical Ida, que avanzó hacia el Noreste de EE.UU. después de haber desembarcado como huracán en Luisiana, cerca de Nueva Orleans, el domingo pasado.
El fenómeno meteorológico cruzó EE.UU. de forma transversal y, aunque con vientos mucho menos peligrosos que los que movía en un principio, provocó niveles de precipitación de récord. La estación meteorológica de Manhattan recogió 80 milímetros de agua entre las nueve y las diez de la noche, el mayor registro para esa estación. En otra estación, a la misma hora, todavía más, 95 milímetros.
El diluvio llevó a las autoridades a decretar por primera vez en la historia de Nueva York el estado de emergencia por riada, que se impuso tanto para la principal ciudad de EE.UU. como para el estado vecino de New Jersey. También hubo lluvias catastróficas en otros estados de la región, como Pensilvania y Connecticut.
El Servicio Meteorológico Nacional de EE.UU. advirtió de que las inundaciones tenían « peligro para la vida» y las autoridades enviaron alertas a los teléfonos de toda la población para que evitaran salir a la calle o quedarse en zonas bajas. También se distribuyó una alerta por tornado que afectó a varias zonas de Nueva York y New Jersey.
Fuente: Efe y ABC