Este nuevo misil hipersónico, el Khorramshahr-4, tiene una velocidad 16 veces superior a la del sonido y es capaz, según las autoridades iraníes, de penetrar todos los sistemas antidefensa.
El misil fue presentado en la televisión pública junto a una réplica de la mezquita de Al Aqsa, situada en el sector palestino de Jerusalén. El Kheibar, última versión del Khorramshahr, es «un misil de carburante líquido de un alcance de 2.000 km, dotado de una ojiva de 1.500 kilos», según la agencia oficial Irna.
Su nombre hace referencia a la ciudad antigua de Khaybar, situada en la actual Arabia Saudita, conocida por una batalla decisiva en el siglo VII, durante la cual el ejército del profeta Mahoma venció a sus miles de habitantes judíos.
El anuncio de la producción de este misil se hizo el pasado mes de noviembre. Las imágenes de su lanzamiento se hicieron públicas el jueves. Esto confiere a Irán una capacidad militar estratégica, especialmente contra Israel.
Según la prensa estatal iraní, la velocidad del misil táctico «puede llegar a Mach 16 fuera de la atmósfera y a Mach 8 en la atmósfera», o sea 16 y 8 veces la velocidad del sonido.
Irán dispone de un vasto programa de fabricación de misiles balísticos y drones que preocupa a los países occidentales. Sólo Rusia, Estados Unidos, Corea del Norte y China disponen de misiles hipersónicos.
Además de este anuncio, Irán está construyendo un nuevo emplazamiento nuclear enterrado bajo la montaña imposible de destruir.
Los diversos programas militares y nucleares de Teherán le confieren superioridad estratégica en la región, mientras que Irán ha decidido normalizar sus relaciones con Arabia Saudita, enfrentada a Teherán desde hace una década.
Fuente: Radio Francia Internacional / Siavosh Ghazi, corresponsal en Teherán.