“17 de mayo de 2021 Nota número 422/ REGES/ HST
Técnica Ingrid Fields
Estadística II
En su despacho
Técnica Fields: le informamos que (sic) a partir de la fecha no puede asistir a su jornada laboral con vestuarios de la etnia negra, debe utilizar su uniforme o vestimenta adecuada para laborar.
Atentamente.
Lic. José Luis Rodríguez
Jefe Enc. del Servicio de Registros
Médico y Estadística (sic)
CC Lic. María Pilar Gordon, Jefe de la Oficina Institucional De Recursos Humanos”
Hace unos día circuló por redes sociales y grupos de mensajería, una foto de esta nota, sellada, rubricada y escrita en lo que parece ser papel membretado con apariencia oficial. La transcribo tal cual, con faltas ortográficas y sintácticas incluidas. Confieso ante Titivillus y ante vosotros, mis hermanos, que he pecado de acción y de pereza, y no he comprobado la veracidad de la misma.
En primer lugar debo decir que me pareció falsa, tanto como un billete de tres dólares y medio, ¿quién puede ser tan gilipollas que va a escribir y firmar de su puño y letra una nota de este jaez sabiendo que en cuanto sea entregada va a tardar entre cero y menos tres en correr como la pólvora de chat en chat y de red en red? ¿Quién es tan imbécil que no puede prever la catarata de insultos, críticas y defenestraciones varias que le esperan?
Nada, que esto tiene que ser falso. Pero luego, meditando y considerando la poca confianza que tengo en el sentido común de algunos de mis congéneres me pongo a dudar. Y oye, que quizá sí. Quizás haya habido alguien así de lerdo. Y que incluso haya creído que la está botando.
De modo que les propongo un juego, vamos a asumir que no es falsa, asumamos, por un momento que es verdadera, que alguien la escribió, alguien la firmó y alguien la recibió. Imaginemos.
Y riámonos a carcajadas hasta que se nos salten las lágrimas, nos duela el estómago y las mejillas y el aliento nos falte. Riámonos y lloremos de frustración y decepción, porque no se puede ser más mogo.
Creo que ya he dejado meridianamente claro en más de una ocasión que lo de designar un Mes de la Etnia Negra me parece una boutade grande como la copa de un corotú, pero es que los eventos que se realizan en conmemoración de esta fecha son aún más ridículos y denigrantes. Y aquí, como en el cuento del traje nuevo del emperador, nadie parece poder asumir que el emperador está en pelota picada y que todos los que lo aplauden como focas también. Es ridículo llevar a los niños a la escuela disfrazados de algo que no tenemos muy claro qué es, igual que es absurdo que solo durante un mes al año aceptemos las trencitas y las usemos, (<<Total, yo soy fula y con ellas me parezco a “La Mujer 10”>>, dice más de una).
¿Y saben por qué es ridículo? Pues porque la sociedad no está preparada para esa conversación, y con estas acciones no estamos preparándola.
Debemos dejar de usar mayo como si fuera Halloween extendido y en lugar de acordarnos de los ‘negros’ un mes, deberíamos asumir de una puta vez y para siempre que no importa un carajo si eres chino, negro, flaco, cojo, gordo o yeyé: la dignidad, los derechos y el respeto debe venir dado todos los putos días, por default y sin meses especiales ni turbantes, ni trenzas, ni ministros haciendo el ridículo.
Hasta que no comprendamos el significado de la palabra respeto seguiremos teniendo que tolerar actitudes y acciones tan ridículas como aquella con la que inicié esta Lobatomía.