La envidiable posición geográfica de nuestro país nos ha servido de bienestar económico pero también constituye un mortificarte calvario.
Panamá es una joya geográfica codiciada por naciones poderosas y, por su ventajosa posición, tuvo clavada en su territorio zonas y bases militares que para algunos estadounidenses fue tortuoso abandonar las parcelas que ocupaban.
A través de los años, la posición geográfica de Panamá siempre ha sido la codicia de quienes quieren dominar el mundo y así lo dió a entender el libertador cuando dijo que ésta podría ser la capital del continente. Acechadas por las circunstancias, Panamá continúa siendo sitio estratégico y, por ende, esto nos mantiene como presa que acechan las naciones poderosas que desean controlar el mundo.
Ahora que estamos en una campaña electoral para renovar a los administradores del Estado, no es extrañar que tentáculos extranjeros se inmiscuyan en nuestros asuntos domésticos para tomar decisiones, alterar la voluntad popular y atrincherarse en nuestras instituciones para regir los destinos de la nación.
Ya observamos como a través de las diplomacias se quieren dictar pautas, descartar candidaturas e imponer otras que son genuflexas a sus intereses. En el forcejeo por ganar las elecciones ahora surgen alarmas sobre la posible nacionalidad de un candidato presidencial que no compagina con la realidad nacional y cuya presencia en actividades políticas viola lo estipulada en nuestra carta magna.
Un candidato presidencial estadounidense o más bien “gringo” como se dice en el argot vernacular sería una deshonra para el país.
No estamos en contra de los estadounidenses que defienden los intereses de su país, pero nosotros también tenemos derecho de unir fuerzas para evitar la intromisión extranjera en los asuntos internos de Panamá, porque no soportamos injerencias en nuestro proceso electoral de tendencias que se inclinan hacia la izquierda o hacia la derecha.
Aquel candidato presidencial extranjero que quiere escurrirse en los asuntos políticos de nuestra nación nos está deshonrando por lo tanto debe ser inhabilitado por espúrreo.