La guerra en Gaza está dando lugar a manifestaciones estudiantiles en los predios de universidades estadounidenses, especialmente en Nueva York. Las autoridades denuncian una retórica antisemita, mientras la toma de campus por activistas está dado lugar a detenciones.
En el campus de la Universidad de Columbia, al norte de Manhattan, en Estados Unidos, los manifestantes propalestinos llevan varios días acampando. Su retórica es cada vez más dura. Una retórica que se ha vuelto abiertamente antisemita, con amenazas contra estudiantes judíos, según sus asociaciones de defensa.
A finales de la semana pasada, la policía efectuó varias detenciones, pero la tensión está lejos de remitir, al contrario. El lunes 22 de abril, la dirección de la universidad, temiendo incidentes al comienzo de la fiesta judía de Pésaj, canceló todas las clases. Pero las manifestaciones continúan y se extienden.
Parte del personal docente se unió a los estudiantes el lunes, y el movimiento se está extendiendo a otras universidades, como la NYU, también en Nueva York, y Yale, una universidad estadounidense de gran prestigio en New Haven, Connecticut. Decenas de estudiantes fueron detenidos allí el 22 de abril. También se registró una importante movilización en la Universidad de Michigan, en Ann Arbor, cerca de Detroit.
Fuertes reacciones
Estas manifestaciones han provocado diversas reacciones, incluso políticas. En una declaración el domingo, el Presidente Joe Biden condenó lo que calificó de «antisemitismo flagrante, censurable y peligroso que no tiene cabida en absoluto en los campus universitarios ni en ningún otro lugar del país». Volvió a denunciarlo durante una visita el lunes.
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, también es muy crítico con lo que ve en su ciudad. Los políticos demócratas que visitaron el lugar también advirtieron de consignas y comportamientos antisemitas. Este comportamiento también fue denunciado por los diez representantes republicanos del Estado de Nueva York, que pidieron la dimisión del Presidente de la Universidad de Columbia. Están encabezados por Elise Stefanik, que ya se había mostrado muy ofensiva durante una comparecencia de varios dirigentes universitarios en otoño, acusados de debilidad ante el antisemitismo y algunos de los cuales acabaron dimitiendo.
También hay reacciones en el mundo empresarial. Por ejemplo, el propietario del equipo de fútbol americano New England Patriots, Robert Kraft, antiguo alumno de Columbia, cuyo edificio lleva su nombre. Explicó que ya no reconocía a la universidad que tanto había amado y que dejaría de financiarla si no se tomaban medidas.
Fuente: Radio Francia Internacional.