La empresa telefónica Digicel Panamá S.A. dejará de operar en Panamá tras considerar que la fusión de Cable & Wireless Panamá (CWP) y Claro representó el fin de la libre competencia para el mercado de las telecomunicaciones en el país.
La empresa solicitó su liquidación voluntaria ante los Tribunales de Justicia Civiles e informó que continuará brindando sus servicios de manera regular a sus clientes individuales y corporativos, hasta que oficialice su salida del mercado.
Sostiene que la probación de la fusión representa un conflicto de interés para el Gobierno que actuó como juez y parte al permitir que las empresas fusionadas vayan a controlar el 56% del mercado, con el Estado panameño teniendo el 49% de participación en este nuevo operador dominante.
La empresa asegura que le cambiaron las reglas con la cuales ingresó al mercado en el 2008, al aprobar la fusión sin considerar los remedios apropiados para los operadores restantes, dejándolos en desventaja.
Digicel Panamá S.A. cuenta con 170 colaboradores a quienes ya comunicó la acción judicial, agradeció y se comprometió a cumplir con sus obligaciones laborales.