Análisis de laboratorio realizados a los pacientes de Nueva Lucha, quienes fueron trasladados al Hospital del Niño y Santo Tomás en la Ciudad de Panamá, revelaron la presencia de parásitos y enterobacterias
Un reciente estudio de campo en la comunidad indígena de Nueva Lucha, ubicada en las montañas del distrito de Donoso en la Costa Abajo de Colón, ha identificado el agua no tratada como el factor clave que desencadenó un brote de gastroenteritis. Según las investigaciones, el consumo de agua directamente del río cercano a sus hogares fue la causa principal de la propagación de esta enfermedad.
Los análisis de laboratorio realizados a los pacientes de Nueva Lucha, quienes fueron trasladados al Hospital del Niño y Santo Tomás en la Ciudad de Panamá, revelaron la presencia de parásitos y enterobacterias. Estos resultados fueron atribuidos al consumo prolongado de agua contaminada.
La situación se vio agravada por la vulnerabilidad de la población indígena, muchos de los cuales sufren de desnutrición, lo que contribuyó a que la gastroenteritis tuviera un impacto severo en la comunidad.
Desde entonces, la población ha adoptado medidas preventivas, evitando el consumo de agua de esta región indígena de Colón, lo que ha contribuido a una disminución en el número de casos del brote.
Este incidente resalta la necesidad urgente de mejorar las condiciones de acceso al agua potable y de implementar medidas sanitarias adecuadas en comunidades vulnerables como la de Nueva Lucha, para prevenir futuros brotes de enfermedades relacionadas con el agua.