Con tan solo 28 años, este joven criado por su madre en el departamento popular de Seine-Saint-Denis ha dado sangre nueva a un partido que dependía de la dinastía Le Pen. De ganar llegar a la Presidencia en 2027, Marine Le Pen lo nombraría primer ministro. A menos que llegue antes, con las elecciones de julio.
Jordan Bardella será el candidato de su partido, la Agrupación Nacional (RN), al puesto de Primer Ministro en Francia, según anunció el lunes el vicepresidente del partido, Sébastien Chenu. Sería la cristalización de un ascenso meteórico para un joven de tan solo 29 años.
Bardella nación en 1995 en Drancy (departamento) Seine-Saint-Denis, en los suburbios populares de París. Hijo de inmigrante italiano con raíces argelinas, fue criado por su madre italiana en un barrio donde se forjaron sus convicciones políticas, asistiendo a los violentos disturbios que sacudieron las periferias de París en 2005.
Con 17 años, se afilió al Frente Nacional, el partido de extrema derecha francés, cofundado y dirigido entonces por Jean-Marie Le Pen.
Allí, ocuparía los cargos de sucesivamente consejero regional en la región parisina, antes de convertirse en portavoz y vicepresidente del partido. En 2019, con apenas 23 años, encabezó la lista de Agrupación Nacional (nuevo nombre del Frente Nacional) en las elecciones europeas de 2019, con sólo 23 años.
Desde noviembre de 2022 preside Agrupación Nacional, sucediendo así a Marine Le Pen. Fue desde ahí que el domingo llevó a la agrupación de extrema derecha a obtener su mejor resultado en las urnas.
Bardella es reconocido como orador, en particular en los debates públicos. Tiene un manejo fluido de las redes sociales. Tiene más de un millón de suscriptores en TikTok, la plataforma preferida de quienes tienen en 15 y 24 años.
Algunos de sus detractores critican la “arrogancia” de un líder demasiado seguro de su “poder”, término que repite una y otra vez desde que teorizó que lo encarnaba, frente a las “fuerzas de la renuncia”.
Bardella cultiva una imagen más liberal que Marine Le Pen y se apresura a establecer relaciones con el mundo empresarial con un discurso favorable a los negocios, capaz de atraer a un electorado diplomado y urbano. Es complementario con Marine Le Pen, quien se dirige a las clases más populares de las zonas periféricas.
Fuente: Radio Francia Internacional.