Colgado sobre un péndulo, cuya fragilidad podría provocar su caída, se encuentra el sistema democrático de nuestro país con la actividad política cuya efervescencia se incrementa al aproximarse las elecciones.
Antes de los comicios, que se efectuarán el 5 de mayo de 2024, conmemoramos en noviembre, los 120 años de nuestra separación de Colombia y 202 años de habernos librado del yugo español.
En noviembre tendremos un mes preñado de acontecimientos como son: día de difuntos, separación de Colombia; honramos los símbolos patrios; glorioso grito libertador atribuido a Rufina Alfaro el 10 de noviembre de 1821 y ese mismo año, el 28 de noviembre, la independencia del yugo de España.
En noviembre Panamá estará repleto de fiestas para conmemorar hechos que forjaron nuestra personalidad como país y una de las naciones más importantes en la constelación universal.
Nos estamos aproximando a un mes cuyas festividades nos hace vibra de emoción patriótica. Veremos como con aires marciales nuestra enseña será portada por panameños que orgullosos reafirman su fervor a nuestra nacionalidad.
Pero ante todo este repicar de tambores, sonar de clarines y despliegue marcial con redenciones a la patria, no olvidemos que tormentas políticas acechan al país por lo tanto debemos proceder con cautela para evitar caer en las garras de aquellos que nos intentar difamar con listas tricolores o desean que sucumbamos con atajos ilegales que desacreditan nuestro sistema democrático.
Rindamos tributos a la nación pero preparémonos para enfrentar hechos que se aproximan una vez se apaguen los fuegos de artificios de noviembre y las luces festivas de diciembre y silencien los tambores carnavaleros porque desembocaremos en un proceso electoral donde prevalece el temor de que se preparan actividades turbias que trastocan la sagrada democracia.
Anhelamos que el peregrinar hacia las urnas se convierta en un tributo al sistema democrático y no sufra distorsiones por las artimañas de delincuentes togados que aparentan mansedumbre pero esconden un espíritu satánico.