Hamas, por su parte, amenazó con matar a uno de los 150 rehenes israelíes cautivos ante cada ataque lanzado por Israel. Otras versiones anuncian que Hamas comenzará a enviar por las redes sociales filmaciones de los rehenes implorando por sus vidas, en el marco de la lucha moral.
Hablando ayer al pueblo por la televisión, el primer ministro Benyamin Netanyahu llamó a tener paciencia y lanzó una amenaza abierta: “Sé que todos queremos resultados aquí y ahora. Tomará tiempo. Pero les prometo, queridos ciudadanos, al final de la contienda sabrán todos nuestros enemigos que fue un grave error atacar a Israel. Lo que haremos a nuestros enemigos durante los próximos días resonará por generaciones”, amenazó Netanyahu.
Mientras tanto, continúan los disparos de misiles a las localidades lindantes a Gaza, obligando a decenas de miles de personas a permanecer en los cuartos de seguridad. Israel mantiene un asedio total a Gaza mientras que el gobierno egipcio cerró el cruce fronterizo de Rafah, la única salida terrestre de ese territorio palestino, hasta nuevo aviso.
Fuentes egipcias insisten que su ministro de inteligencia transmitió 10 días atrás una advertencia a Israel por el inminente ataque de Hamas, pero las autoridades israelíes lo niegan.
“Debemos compensar estas carencias”
Israel traviesa su 11 de septiembre particular y todo el país rema en la misma dirección. La fractura social que Israel arrastra desde la aparición del gobierno de Benyamin Netanyahu junto con partidos de ultraderecha queda atrás en un momento en el que el país se enfrenta al peor ataque desde su fundación en 1948.
Es el caso de Hermanos y Hermanas en Armas, un colectivo de reservistas y veteranos que nació para protestar contra la reforma judicial. El grupo llegó a amenazar con entrar en huelga y retirar su apoyo al ejército, pero este no es el momento para hacerlo.
Yiftach Golov, portavoz de la organización, lo cuenta a RFI: “Nos dimos cuenta de ello sobre las 7.30 de la mañana del mismo sábado. Estábamos recibiendo los videos y las voces de la población del sur de Israel. No se trata de atacar un objetivo estratégico de Hezbolá o de Irán. se trata de nuestros hermanos y hermanas del sur de Israel, que están siendo secuestrados, y tenemos nosotros debemos defender a nuestro país”.
Este y otros colectivos similares entran en acción para apoyar las fuerzas israelíes mientras apuntan contra las autoridades: “Una vez nos dimos cuenta de que la indefensión del gobierno es tan grande, nosotros debemos compensar estas carencias y dar un paso al frente”, dice.
Fuente: Radio Francia Internacional, Daniel Blumenthal y Joan Cabasés Vega corresponsales en Tel Aviv y Jerusalén.
